Los humedales esteparios de La Mancha son depresiones poco profundas, de orillas suaves, con aguas que se van evaporando durante el verano hasta quedar completamente secos en la mayor parte de los casos. Son humedales fluctuantes, ya que el volumen de agua embalsada está relacionado con las lluvias. Unos años pueden tener mucha agua y en otros apenas se encharcan.
Las orillas y una gran parte de sus cubetas, al quedar secas, se cubren de plantas adaptadas a los suelos salinos y originan un paisaje peculiar, exclusivo de este tipo de ecosistemas, que nos recuerda a las ensenadas y marjales del litoral. Los humedales esteparios de La Mancha son nuestros pequeños mares interiores.